Esta ponencia pretende dirigir la mirada hacia uno de los tantos problemas a los que se ha enfrentado la antropología a lo largo de su ya nutrida historia. Nos referimos a lo que Carmen Martínez Novo dilucidó como ¿Quién define al indígena? (2006). Más de una vez hemos defendido el postulado de que los pueblos indígenas se han definido a sí mismos, otras veces, al contrario, pareciera ser que son sujetos no indígenas los que asumen la posición de decidir si se trata de indígenas o no. Algunos pensarán que es una construcción colectiva donde se entretejen múltiples actores sociales, otros opinan que es un asunto de agencia, es decir, una decisión personal. Nosotros consideramos que son ambas categorías las que contribuyen a definir quién es quién basados en códigos culturales, históricos, políticos, económicos y de parentesco, es decir, consideramos que hablamos de una relación dialéctica más que dicotómica.
Nuestros sujetos de estudio son los N’dee de Chihuahua, mejor conocidos como Apaches, quiénes se encuentran en un proceso de búsqueda de reconocimiento como pueblo indígena nativo de México. Tradicionalmente se les ha concebido como un grupo en resistencia frente al colonialismo europeo en un primer momento y posteriormente estadounidense y mexicano, ya que no se les ha respetado su derecho a existir como pueblo libre, además se les ha tratado como víctimas de violencias epistemológicas pues se han minimizado los conocimientos que tienen sobre sí mismos. No obstante, eso supondría que son sujetos pasivos que aceptan su rol de dominados de manera sumisa, empero, si nos guiamos por el hecho de que han llevado a cabo prácticas activistas que tienen el fin de visibilizarlos frente a la sociedad y autoridades chihuahuenses, nos da una visión mucho más activa de estos sujetos. Entonces volvemos a nuestra premisa ¿Quién define al N’dee?