En esta ponencia, se analizarán cómo la violencia institucional y estructural ejercen diferentes vías de presión en la labor diaria de los profesores de nivel secundaria. Así como las formas en las que se conjugan estas formas de violencia para impactar en la relación con el alumnado, lo cual lleva a la presencia de violencia manifiesta.
En Bahía de Banderas, Nayarit, se llevaron a cabo cuestionarios psicosociales en chicos y chicas de secundaria con los que se establecieron perfiles diagnósticos por escuelas. Después se realizaron entrevistas de seguimiento a profesores, profesoras y otros integrantes del sistema escolar. Las entrevistas permitieron captar la opinión e hipótesis del profesorado respecto de los resultados de sus alumnos, así como conocer sus propias circunstancias ante este contexto.
Por un lado, se describen cambios generacionales, normativos e institucionales, respecto del papel y autoridad del profesorado y su figura en la comunidad. Las reformas educativas, así como el deseo de la autoridad escolar de no entrar en conflicto con los padres de familia, han hecho del profesorado el eslabón más débil. Sin embargo, la expectativa que se coloca sobre ellos y el logro que deben tener con el alumnado es mayor. Los padres de familia por situaciones de segregación urbana y trabajo no pueden atender las necesidades de sus hijos y colocan esas obligaciones a la escuela. Finalmente, los alumnos van aprendiendo del nuevo balance de autoridad y pueden discutirle al profesorado y sentirse respaldados por los otros autores del sistema.