La permanencia y usos de la medicina tradicional es importante de considerar en el mundo actual, ya que toma un papel importante en los tratamientos médicos alternativos que complementan en varios casos la medicina alópata. En este caso para examinar el objetivo de la investigación es importante considerar la perspectiva de los propios expertos en curación, como es el caso de Nana Carmen, una mujer sanadora de la Sierra Gorda de Guanajuato. Mujer cuya trayectoria se basa en el empoderamiento y autonomía femenina se plasma en la perseveración y práctica de los saberes ancestrales en el cuidado de las mujeres de su comunidad, destacando su contribución a la salud y al activismo que realizó en su comunidad, ya que también destaca en la organización social de su comunidad, pues ella gestionó e hizo realizado los servicios como agua y luz para su comunidad en el municipio de Tierra Blanca, Guanajuato.
El municipio de Tierra Blanca es un lugar clave para que los saberes tradicionales en la medicina y herbolaria sea un factor super importante, sobre todo en el contexto cultural e histórico de la medicina tradicional Otomí, donde en el municipio aún hay personas que se identifican con este grupo étnico, entre ellas Nana Carmen.
Finalmente, el legado de Nana Carmen representa un ejemplo a seguir para la perseveración de los saberes tradicionales y el empoderamiento femenino en las prácticas de la medicina, ya que ella tiene múltiples reconocimientos e incluso una cédula profesional acreditada como médico tradicional por parte del gobierno. Su historia destaca la relevancia de reconocer y promover estos saberes ancestrales como herramientas fundamentales en la lucha por la salud y el empoderamiento de las mujeres.