Objetivo: interpretar las narrativas sobre ganadería y agricultura de traspatio que realizan las mujeres trabajadoras agrícolas asentadas en Villa Juárez, Navolato Sinaloa, como estrategias para el autoconsumo y que a su vez les permite desarrollar procesos de empoderamiento, aún en contextos de precariedad laboral y social. Metodología: el enfoque fue cualitativo con etnografía feminista y técnica de grupos de discusión en 6 sesiones de dos horas con 12 mujeres. Resultados: en las cotidianidades de las mujeres trabajadoras agrícolas asentadas en Navolato no se da una división de ámbitos doméstico y extradoméstico, sino una movilización continua en el que desarrollan múltiples jornadas de trabajo y múltiples presencias para poder conciliar y subsistir ellas y sus familias, sobre todo en un contexto diferente al de sus comunidades de origen, regularmente indígenas, en esta idea, los asentamientos no están definidos solo por la apropiación del espacio físico, sino que, en su proceso de adaptación resisten mediante la preservación de sus costumbres y tradiciones, tales como la agricultura y ganadería de traspatio, actividad que desarrollan en sus predios y mediante el conocimiento adquirido en el trabajo agrícola remunerado y buscando los mecanismos efectivos para tener éxito, a fin de proveerse de productos alimentarios tanto para su autoconsumo como para realizar trueques. Conclusiones: a pesar de que el espacio físico de los predios no permita desarrollar la ganadería y agricultura de traspatio a gran escala, si mínimamente pueden sembrar productos en masetas tales como cilantro, chile, tomate, cebolla y crear pequeños corrales para las gallinas y borregos y disponer de ellos, por lo que incluso en condiciones precarias y de una continua vulneración de derechos de las mujeres, ellas aprenden a desarrollar estrategias, capacidades y alternativas para volverse agentes de cambio en sus comunidades, a la vez que logran desarrollar procesos de empoderamiento.