Entre los pueblos originarios de la Sierra Norte y Nororiental del Estado de Puebla en México existen diferentes acciones y estrategias de organización social y resolución de conflictos de manera no violenta que son elementos de capital social, definido este como el conjunto de normas, redes y organizaciones construidas sobre relaciones de confianza y reciprocidad. Dichas acciones contribuyen a la cohesión de los grupos humanos así como al bienestar de las personas. Esto no sería posible sin las normas culturales basadas en el orden de la reciprocidad que a su vez, contribuyen a una adecuada salud planetaria al mediar entre las formas de organización social y la administración equilibrada de los recursos para el bienestar del grupo y los individuos.