Antes de la pandemia de COVID-19, diversas empresas ya implementaban el trabajo remoto, que consiste en realizar labores desde un lugar distinto a la oficina principal, comúnmente desde casa, utilizando tecnologías de la información y comunicación para mantener la productividad. Con la disminución de las restricciones del confinamiento, el esquema híbrido ganó relevancia al permitir la combinación de períodos de trabajo en la oficina y de forma remota, brindando flexibilidad a los empleados para equilibrar la colaboración presencial con la autonomía del trabajo a distancia.
Desde el inicio del confinamiento, aproximadamente el 90% de las empresas en México han migrado hacia estos esquemas, generando transformaciones significativas en cuanto al equilibrio entre la vida laboral y personal, la cohesión entre equipos virtuales y la diversidad cultural dentro de las organizaciones.
Ante estos desafíos, la antropología, con su enfoque etnográfico, se encuentra ante nuevas oportunidades y retos. La antropología del trabajo puede enriquecerse no solo con las estrategias clásicas de análisis del trabajo, sino también mediante la exploración de nuevas posibilidades para comprender el trabajo en el capitalismo contemporáneo, en contextos laborales donde la interacción social y el trabajo mismo está mediado por tecnologías digitales.
Con base en mi experiencia realizando una etnografía digital en una agencia especializada en diseño UX/UI, esta presentación abordará los aspectos fundamentales relacionados con el trabajo remoto en organizaciones orientadas al sector servicios. Asimismo, se examinarán metodologías y técnicas de investigación diseñadas para facilitar la incursión en la investigación in situ en entornos laborales influenciados por la tecnología. El propósito es trazar nuevas perspectivas de investigación sobre el trabajo contemporáneo que contribuyan a enriquecer el ámbito de la antropología del trabajo.