Frente a una creciente demanda internacional por los textiles artesanales, las tejedoras y bordadoras de Los Altos de Chiapas están abriéndose paso en nuevos espacios comerciales. Para vender sus productos, entran en contacto con actores fuera de sus comunidades, ganan su propio dinero y, en el proceso, forjan nuevas prácticas e identidades laborales. Para comprender estos cambios, hay que dirigir nuestra mirada al contexto en donde ocurren: las casas en donde trabajan las mujeres, el ritmo de sus actividades diarias, su relación con el trabajo de sus maridos y las exigencias de sus clientes. Este video subraya estos diversos contextos y relaciones al documentar el trabajo de bordadoras tseltales de Aguacatanengo y El Puerto. Estas mujeres, que forman parte de la Colectiva Malacate, hablan de su trabajo y sus vidas mientras terminan un pedido grande para un cliente de los Estados Unidos.