El bordado y tejido tradicional de los pueblos originarios y la agroecología son prácticas que se combinan en el Jardín Comunitario del Barrio de Tlaxcala en San Cristóbal de las Casas, Chiapas. Juana, Patricia y Matilde (mujeres indígenas de habla tseltal y tsotsil, respectivamente) son la Colectiva Muk ta Luch y se conocieron durante la pandemia COVID 19. Descubrieron que en ese contexto, era necesario tejerse para vivir.
Este video es testimonio de la relación de amistad y lucha que estas mujeres construyen día a día y cómo sus hijas e hijos forman parte esencial de los procesos de organización colectiva. Las infancias son aquí lo que el luchador social Amilcar Cabral llamó “flores de la revolución”.
El presente proyecto forma parte de una investigación más amplia titulada “Tejernos para vivir: Una apuesta por la autorrepresentación de la Colectiva Muk ta Luch a través del video participativo y las autohistorias”.