La presente propuesta tiene como objetivo analizar algunos casos situados en el sureste mexicano sobre las violencias que las mujeres rurales experimentan en diferentes ámbitos de la vida cotidiana. Las propuestas que integran esta mesa representan un mosaico dinamizado por procesos económicos, políticos, institucionales y ambientales que articulan desigualdades sociales profundas. A su vez, se parte del reconocimiento de las mujeres como agentes de transformación y de acción que tejen alternativas ante las problemáticas que las atraviesan. Éstas emergen de la misma práctica y en contextos comunitarios.
Consideramos que el diálogo generado desde esta mesa abonará a la reflexión sobre las diferentes experiencias de mujeres rurales en el país que, como sector diverso, resienten, articulan y responden de maneras específicas a las diferentes violencias que las trastocan.