Las antropólogas feministas han impulsado de forma decidida nuevas formas de teorizar y practicar las disciplinas antropológicas. Desde la segunda mitad del siglo XX hasta la fecha, se han multiplicado las investigaciones de campo, las elaboraciones teóricas, las resignificaciones de los procedimientos etnográficos y las innovaciones metodológicas producto de las distintas formas de articulación entre antropología y feminismo(s) que protagonizan las especialistas en las más distantes latitudes.
Con el interés de profundizar en el conocimiento de los aportes de las colegas en países que han sido poco abordados en las historias de las modalidades regionales de la antropología, desde 2021 conformamos un equipo interinstitucional de investigadoras y estudiantes de licenciatura y posgrado, abocado a documentar las trayectorias de las antropólogas feministas en México, Centroamérica y el Caribe. Después de una investigación meticulosa, se conformó una base de datos que sustentará la elaboración de una línea de tiempo, una genealogía y una cartografía analítica.
El objetivo central de este simposio es compartir la experiencia de llevar a cabo una investigación antropológica feminista, interinstitucional, intergeneracional e intercultural. Por esa razón, incluye la participación de investigadoras y estudiantes que comparten la autoría de ponencias colectivas, así como ponencias individuales en las que algunas de las tesistas darán a conocer las articulaciones entre sus propias investigaciones y el proyecto en el que participaron.
Con este simposio buscamos también abrir las puertas al diálogo con quienes realicen investigaciones afines, sean antropólogas o formadas en otras disciplinas, así como con antropólogas feministas que desarrollen prácticas de investigación o activistas en la academia y en otros ámbitos institucionales o sociales.
Una de las consideraciones conceptuales que emergieron de esta indagación es el cuestionamiento a la homologación entre Estados nación y caracterización de las antropologías como “nacionales”. Los flujos, intercambios, tensiones e incluso distanciamientos que se observan en el campo hablan de relaciones que trascienden las fronteras nacionales, como se observará en la cartografía que, lejos de ser estática, pretende dar cuenta del movimiento constante de personas, ideas y teorías que tiene lugar en el ámbito geopolítico que delimitamos en el proyecto. En el caso del Caribe, esos flujos son afines a los movimientos diaspóricos que han protagonizado grupos importantes de su población, flujos que, en el ámbito académico, ponen en evidencia que los que se han considerado centros rectores de las teorías antropológicas son mucho más diversos, multisituados y difusos de lo que narra las historias euro-estadosunidos-céntricas de la antropología.
Por esa razón, aspiramos a que este simposio convoque la atención de especialistas en la antropología feminista, así como de quienes trabajan desde enfoques no hegemónicos.